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Este tipo se produce a partir de maíz y se conoce como bioplástico de ácido poliláctico. Este tipo de bioplástico es significativamente más amigable con el medio ambiente que el plástico típico. El plástico es notoriamente lento para degradarse de forma natural, mientras que el bioplástico de ácido poliláctico, por el contrario, tiene la capacidad de hacerlo — ¡y rápido! Comienza a descubrir más sobre por qué los bioplásticos de ácido poliláctico son una excelente opción para ambos, nosotros y nuestro planeta.
Aquí hay algunas razones por las que los bioplásticos de poliláctico son una alternativa viable. Por una parte, son biodegradables. Estos están diseñados para descomponerse en el medio ambiente sin dañarlo. Sin embargo, cuando se descarta el bioplástico, este se degrada y vuelve a la tierra, mientras que el plástico regular puede permanecer cientos de años. Me gusta mucho este hecho porque los residuos de plástico normal pueden terminar contaminando nuestras tierras y océanos durante muchos años. Los bioplásticos de poliláctico también tienen una huella de carbono menor que el plástico tradicional, tanto en el proceso de producción como a lo largo de su ciclo de vida. Esta es una de las mejores razones para elegirlos, ya que ayudaría a mantener nuestro medio ambiente limpio y reducir la contaminación al menos en dos aspectos.
